Esta cuestión está relacionada con la anterior porque dependiendo de la envergadura de la aplicación, el esfuerzo en el desarrollo de apps será mayor o menor. Para hacernos una idea, podríamos decir que una app sencilla necesitaría en cada plataforma de un mes y medio de trabajo, una de complejidad media entre 3 y 5 meses y las de complejidad elevada de 6 meses en adelante.

La empresa de desarrollo de apps necesita entender al cliente, qué problema resuelva su aplicación, cuál es su objetivo, de dónde se obtienen los datos que ofrece la app, qué monetización tiene pensada para su app, cuál es su modelo de negocio. Todos estos aspectos nos ayudan a ponernos en la piel del cliente, esto no va solo de funcionalidades.

Lo ideal es que el cliente haya trabajado previamente la idea de su app, redactando un briefing que contenga las funcionalidades de su aplicación móvil. Si indica la prioridad de las mismas, se entenderá mejor cuál es el core de la app y facilitará obtener un MVP o pasear el proyecto en el caso de que sea necesario.

1. Estudio de la funcionalidad: revisión de la documentación aportada por el cliente.
2. Reunión con el cliente para aclarar dudas y validar conjuntamente el proyecto final.
3. Exponer al cliente la solución propuesta, planificación y presupuesto.
4. Diseño UX y validación por parte del cliente.
5. Diseño UI
6. Desarrollo app Android / Desarrollo app iOS

El backend, también llamado CMS o servidor de la aplicación móvil centraliza las peticiones que se hacen desde el dispositivo móvil. Así, cuando el usuario hace una petición en la app, el backend accede a su repositorio de datos, encuentra y filtra la información solicitada y la devuelve al usuario.

Hay que tener en cuenta que la mayoría de los puestos en el desarrollo de apps se necesita un servidor, y su desarrollo tiene la inversión como mínimo de una aplicación sencilla. En ocasiones hay empresas que ya tienen funcionando un CMS que utilizará la aplicación móvil para obtener los datos, para el resto de casos nosotros nos encargamos del desarrollo del servidor.

Cuando el cliente confía en nosotros no debe preocuparse de nada más. Solo necesitamos comprender qué necesita para acompañarlo en el camino, desde la elección de colores para su marca hasta el diseño de su logo. Nuestro departamento de diseño aportará varias opciones y asesorará sobre la mejor elección.

A la misma vez que avanza el desarrollo de apps debe hacerlo la web, importante para lograr mayor conversión y facilitar el contacto con los futuros clientes. También nos encargamos de realizar las animaciones necesarias para presenta el producto en el caso de que se nos solicite.

En este caso, para asumir un proyecto que ya está empezado tendríamos que hacer una auditoría previa para ver que la aplicación nativa se ajusta a nuestra estándares de calidad. Una vez que comprobemos que podemos trabajar con el código existente, tendríamos que presupuestar el desarrollo de apps de la misma forma que hacemos en el resto de los casos.